Las tareas que implique una exigencia intelectual elevada provocan fatiga mental o nerviosa como consecuencia de una alta exigencia de atención, de análisis y control por parte del trabajador, por la cantidad de información que recibe y a la que debe dar respuesta tras analizarla e interpretarla.
Esfuerzo mental es la cantidad de esfuerzo intelectual que se debe realizar para conseguir un resultado concreto.
Los síntomas de fatiga mental son:
- Dolores de cabeza.
- Sensación de cansancio.
- Alteraciones en la capacidad de atención.
- Somnolencia.
- Fallos de precisión en los movimientos.
Todos estos síntomas, se traducen en disminución del rendimiento, de la actividad y aumento de errores.